LOVE IS IN THE EARS

A mi edad y de forma totalmente sorpresiva... ME HE ENAMORADO !!! Y es que estoy "loquito de amós" por Myles Kennedy, cantante y guitarrista de la banda ALTER BRIDGE. Precisamente en estos momentos, él está jugueteando con su voz en mis orejas y se me eriza el vello. Pero no creáis que me escondo de esta nueva e inesperada relación, no: se lo he confesado a mi mujer y ella lo comprende perfectamente. Claro que esta clase de confesiones son mucho menos traumáticas para una pareja cuando el enamoramiento por otra persona se restringe tan solo al ámbito musical.

Hace bien poco que he empezado a escuchar a esta gran banda, a pesar de saber de su existencia -y de su calidad- hace ya muchos años. Y es que la cantidad de buenas bandas y buena música es inmensa -y encima está escondida entre toneladas de vulgaridad y "mierders" desvergonzados-, el tiempo libre el que es y los hobbies, en mi caso, muchos y tremendamente devorahoras. No podemos escuchar TODO el material musical existente con la debida atención y nos moriremos sin disfrutar de muchísmas cosas que nos hubiesen gustado, amig@s: es duro asumirlo, pero es así.

Seguro que dentro de un tiempo más o menos largo, este amor enfermizo que ahora achicharra mi alma como las mismísimas llamas del infierno, se irá suavizando y, como acostumbra a pasar con la mayoría de las relaciones que han escrito nuestro diario amoroso, se convertirá en un bonito recuerdo con el cual volveremos a disfrutar de vez en cuando, aunque en este caso sin las consecuencias de hacer lo mismo con una expareja real, claro. Eso mejor dejarlo como está, que por algo está así XDDD

Y como en las rupturas de la vida real, también habrán bandas que nos pondrán los cuernos de mala manera y que, a partir de ese momento, recordaremos con una cierta amargura por lo que fue, lo que pudo ser y ya, seguramente, nunca será. En mi caso, los discos de los "METALLICA" que siguieron al "album negro" rompieron, en cierta manera, mi corazoncito metálico. Aunque con el tiempo, en la mayoría de las ocasiones, llegas a perdonar -aunque nunca olvidar, claro. Por no hablar de las majaderías en las que se embarcó últimamente mi querido YNGWIE MALMSTEEN que, después de componer varias decenas de temas preciosos y contratar para cantarlos a algunos de los mejores vocalistas del metal... decide que quiere ahorrarse esa pasta -debe de ser muy pobre, el "muyayo"- y cantar él mismo. El bueno de Yngwie es un monstruo de guitarrista, pero el gran DIO no le obsequió con unas cuerdas vocales a la altura de sus benditas falanges. En fin, aún es joven y puede recapacitar, si consigue sacarse de una puta vez ese EGO descomunal de encima antes de que le parta la espalda y le impida caminar hacia adelante.

Bueno, pues hasta aquí este post. y recordad: enamoraos todo lo que podáis, cambiad de pareja a menudo, no seáis unos racistas musicales -ni de ningún tipo, faltaría más-, disfrutad de retozar con la música a todas horas como si no hubiera un nuevo amanecer e intentad que cada nueva relación os aporte algo nuevo y, como no, un montón de alegría para vuestra alma. Por mi parte, dejaré descansar un ratito al señor Myles para que tome aire y se recupere. Ahora es un buen momento para conectarme a ese "TINDER" musical llamado SPOTIFY y dejar que, con su lista de "Descubrimiento Semanal", me presente a alguna alguna nueva y excitante pareja de la que prendarme. Y es que en la música, por suerte, el "poliamor" está totalmente aceptado ;-)

EL PINGANILLO: ESE GRAN DESCONOCIDO

La gente que nos ganamos la vida con oficios digamos "raritos", tendemos a dar por sabidas ciertas cosas que, aunque para nosotros sean nuestras herramientas de trabajo diarias y estemos convencidos de  que todo el mundo sabe su utilidad, un día cualquiera, más tarde o más temprano, la inapelable realidad nos escupe en la cara que el resto del mundo no tiene por qué cojones saber qué demonios es eso que llevas colgando de la oreja mientras cantas. Así pues, les presento al amigo de los músicos actuales: EL PINGANILLO.

Y remarco lo de ACTUALES porque hace años -y más para aquellos que venimos del rock más duro-, el uso de este aparato era algo testimonial: solíamos tener delante -en el suelo- una especie de altavoz -monitor para los amigos- donde los cantantes -y los músicos en general- podíamos pedirle al técnico de monitoraje- o en su defecto, directamente al técnico de sonido- que nos pasará nuestra voz, la guitarra, etc, para tener una referencia sonora válida sobre el escenario para afinar o seguir la canción e intentar acabarla todos a una, cosa altamente deseable, claro XDDD

Y es que la gente que no se dedica a pisar los escenarios no es consciente, la mayoría de veces, que lo que escuchan ellos delante de las P.A.s -los altavoces grandotes de la parte delantera del escenario, vamos- no tiene nada que ver con lo que escuchamos nosotros sobre las tablas; dependiendo de la reverberación del  local y del volumen que tengan los músicos en sus altavoces -los hay con cierta tendencia en poner sus amplis al 11-, la pelota acústica que se puede formar arriba es terrible, con lo que muchas veces ya no es que no te oigas lo suficientemente bien para cantar de forma relajada, sino que más veces de las deseadas eres absolutamente incapaz de conseguir afinar, por no escuchar ninguna referencia melódica clara.

Así pues, estos auriculares que llevamos en las orejas sustituyen a esos monitores que antes estaban en el suelo: por ellos, escuchamos los instrumentos que previamente le hayamos pedido a los técnicos de sonido, nuestra voz, etc. También se pueden comunicar contigo desde la mesa de sonido para informarte de alguna cosa importante en medio de la actuación, aunque no es algo que suceda a menudo -lo de que suenen voces en tu cabeza durante un bolo es más bien cosa de personajes como Ozzy Osbourne y acólitos XDDD

Hay cantantes que se ponen los dos pinganillos a la vez -uno en cada oreja, se entiende-; otros, como yo, sólo uno -el derecho, por cierto; ya sabéis los que me conocéis que soy un poco neuras y con los dos me siento demasiado aislado de la realidad para hacer bien mi trabajo. Los hay que llevan moldes hechos a medida para su canal auditivo; otros tiramos con los modelos estándard -los he probado a medida y, en mi caso, no me gusta la sensación. Eso sí: si el volumen del escenario -o el que te llega de rebote desde las P.A.s  y los sub-graves es excesivo, tanto con los monitores tradicionales como con los "modernos" pinganillos pueden acabar con las orejas temblando. Y quizás más con estos últimos, pues te envía el sonido más profundamente al interior de tus orejas. Ganarte la vida sobre los escenarios es algo maravilloso, pero tu oído puede que no disfrute tanto con ello y, al cabo de unos años, tu otorrino no tarda en darte alguna que otra mala noticia. Cada trabajo tiene sus pros y sus contras, tampoco hay que hacer un drama de ello.

Para ir terminando y a modo de resumen: estos auriculares sirven, al igual que los altavoces tradicionales -monitores-, para escuchar la música sobre el escenario, pues nada tiene que ver lo que se oye abajo con lo de arriba, que a veces es un auténtico caos. Así que ya sabéis: la próxima vez que escuchéis a un cantante desafinar como un gato en celo, preguntaros si no será culpa de que el pobre no oye una mierda desde su posición. O igual es que, después de estar cantando durante horas, su voz o sus oídos se muestran totalmente incapaces de hacer su trabajo de forma correcta, pues todo tiene un límite y, los que nos dedicamos a ganarnos la vida sobre los escenarios, más de una vez, nos vemos obligados a traspasar nuestros límites y pringar de mala manera.

Eso sí: que nadie me quite este trabajo, porque no lo cambiaría ni por ser ministro. Larga vida al rock'n'roll, a la música en general y, sobretodo, a la música en directo. Y mirad con buenos ojos a l@s cantantes de orquesta porque, en este mundo actual de "autotunes" y playbacks descarados en televisión, much@s de nosotr@s nos dejamos la salud sobre los escenarios para ofreceros cada día la mejor actuación posible, mientras que otros con más fama y nombre se dedican  a cantar lo justo y a vivir de la sopa boba.
Abrazote y a disfrutar, amig@sssss !!! ;-)

P.D. Y que conste que hay famosos y famosetes que se lo hacen de puta madre, pero no es menos verdad que otros viven del cuento de forma descarada, pues el arte es algo tan subjetivo que permite que cada uno tenga su opinión. Y las opiniones se compran, no lo olvidéis. Ésta es sólo la mía, que conste; si alguien la quiere comprar, estoy abierto a ofertas, que ya tengo edad para venderme XDDD

PRUEBA SUPERADA !!! :-)

Otro de esos vídeos locos míos que sólo me importan a mí XDDD

Pues sí, amig@s: al final lo he conseguido y he vuelto a subir hasta un "Mi", como en mis tiempos mozos. Y sin que me rasque -prácticamente- la voz, que si se trata de hacerlo con la voz cascada nunca tengo problemas para llegar a esas notas. A mis 45 tacos, esto me llena de "orgullo y satisfacción" XDDD

Siempre he dicho que soy un cantante diésel: envidio a toda aquella gente que es capaz de cantar de puta madre, con la voz finita y sin forzar, sin un calentamiento previo y pasando de 0 a 100 en un abrir y cerrar de... boca :-P

En mi caso, llegué a este "Mi" después de estar todo el domingo por la mañana ensayando un medley de Queen que estrenaremos esta temporada con la orquesta Saturno. Puedo empezar el ensayo cantando de forma agonizante, como lo haría una cafetera vieja... y al cabo de unas horas, cuando el resto de los mortales necesita descansar la voz debido al esfuerzo, yo es cuando estoy más en forma, pudiendo llegar a tonos que al principio del ensayo me parecían imposibles de alcanzar.

Eso sí: al igual que los vehículos diésel, supongo que el día que mis cuerdas revienten, la reparación me va a salir carísima :-P

Decir que en mi caso, "calentar" no se parece en nada a la forma tradicional de hacerlo; yo soy más bien brutote y no le aconsejo mis métodos a nadie. A mí me cuesta un esfuerzo considerable que me suene la voz finita, pues mi voz "natural" siempre ha sido algo ronca. A día de hoy -esto va cambiando-, para empezar a "abrir mi garganta", caliento con el "I walk alone" del grandísimo JORN, pues aunque es una canción alta y dura de cantar, en mi caso puedo dejar que fluya mi ronquera libremente y, al cabo de un tiempo, me queda la voz relajada y en condiciones para cantar en otras tesituras más suaves. Sí, ya sé que soy una persona rara y que los profesores de canto y logopedas que tengo por aquí se estarán llevando las manos a la cabeza, pero el caso es que, a mí, me funciona. Y ya he dicho que no se lo recomiendo a nadie: cada persona es un mundo y tod@s sabemos qué patas de conejo nos resultan más eficientes en nuestro caso. Según mi propia experiencia, sé que mi peor enemigo es mi propia mente: todo lo que haga para apaciguar a este demonio interior que me acompaña puteándome desde el primer día, resulta en algo bueno para mi voz.

Pues eso: que me siento muy satisfecho con haber llegado hasta este "Mi" -aquí me planto; ahora, a afianzarlo- y espero que esta nueva temporada de ganarme la vida con mi voz que depare muchas alegrías y pocos resfriados.

Un abrazote a tod@s y long live rock'n'roll, amig@s !!! \m/ ;-)

P.D. Perdonadme por enseñaros gran parte de mis empastes XDDD